En la actualidad, la conciencia ambiental y la seguridad alimentaria son temas cruciales que influyen en nuestras decisiones de consumo.
Uno de los temas que está generando debate en la actualidad es el uso extendido del poliestireno expandido (EPS), comúnmente conocido como porexpan, poliexpan o corcho blanco, en envases alimentarios.
Aunque es ampliamente utilizado debido a su bajo costo y versatilidad, el EPS plantea desafíos significativos en términos de sostenibilidad y seguridad, que merecen una reflexión más profunda. Nosotros te lo contamos.
Problemas ambientales y baja sostenibilidad
El EPS es conocido por su capacidad para mantener los alimentos frescos y protegidos durante el transporte y almacenamiento. Sin embargo, su impacto ambiental es motivo de preocupación.
El EPS es difícil de reciclar y puede permanecer en el medio ambiente durante siglos, contribuyendo a la acumulación de residuos plásticos. Además, su proceso de fabricación consume recursos no renovables y emite gases de efecto invernadero.
La búsqueda de alternativas sostenibles, como envases compostables o reciclables, se ha vuelto esencial para reducir el impacto negativo en el ecosistema
Seguridad alimentaria en riesgo
Otro aspecto crucial es la seguridad alimentaria. Aunque el EPS es eficaz para mantener los alimentos frescos, existen preocupaciones sobre la migración de sustancias químicas desde el EPS hacia los alimentos, especialmente cuando se exponen a altas temperaturas.
Estas sustancias podrían ser dañinas para la salud humana a largo plazo. La búsqueda de alternativas seguras es esencial para garantizar que los envases no comprometan la calidad y seguridad de los alimentos.
Industria y consumidores: explorando alternativas
Ante estos desafíos, la industria está explorando alternativas más sostenibles y seguras para este tipo de envases. Por ello, desde GRUPO TAVFOOD creamos Ecoocel, la marca de bandejas para alimentos hechas de fibra natural, lo que las convierte en compostables y reciclables.
Los consumidores también juegan un papel vital en esta cuestión. Elegir productos en envases más sostenibles y exigir transparencia a las empresas puede impulsar el cambio hacia prácticas más responsables.
Además, reducir el consumo general de envases desechables puede contribuir significativamente a la reducción de residuos.
Ecoocel apuesta por la búsqueda de alternativas innovadoras y la adopción de prácticas responsables para conseguir un futuro donde los envases alimentarios sean seguros y respetuosos con el planeta.
¿Tienes dudas o quieres más información? No dudes en contactar con nosotros a través del número de teléfono 918 950 989.
¡Estaremos encantados de charlar!
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